Amigos ¡Vamos a ver los títeres!
Rafael Benito ArjonillaEl títere paseaba en una bicicleta que le había prestado el titiritero -pues ni siquiera eso tiene una marioneta, aparte de la estaca que siempre lleva al cinto-, y se detuvo a ver el paisaje: bellísimo, ¡imposible pedir más!: un inmenso árbol se alzaba sobre las olas de un campo de centeno salpicado por innumerables …